viernes, diciembre 19, 2003 :::
 
Fuente: Diario de Sevilla Digital
Fecha:19-12-03
Autora: Trinidad Perdiguero


castilleja de guzmán

El Consistorio vincula el arreglo del jardín de Forestier a su apertura
La Junta no ha gastado los 300.000 euros previstos para la obra del paisajista francés, mientras se ultima su declaración como BiC

El Ayuntamiento de Castilleja de Guzmán sigue empeñado en recuperar para sus vecinos y con uso turístico una de sus joyas patrimoniales: los jardines que en 1929 diseñó en la Hacienda la Divina Pastora el urbanista Jean Claude Nicolas Forestier, la misma mano que firma el sevillano parque de María Luisa. El espacio pertenece a la Universidad de Sevilla y el presupuesto de la Junta de 2003 prevé 300.000 euros para rehabilitarlo, pero -según explicó ayer el alcalde, el socialista Carmelo Ceba- el Consistorio ha pedido que la actuación no se ejecute hasta que se garantice que el parque se abrirá al público. Ahora, para visitarlo hay que pedir permisos, ya que está incluido en el Colegio Mayor Buen Aire, que gestiona una orden religiosa.

Ceba avanzó que ya está ultimado en la Dirección General de Bienes Culturales de la Junta el expediente para su declaración como Bien de Interés Cultural (BIC), tras la petición que el Consistorio hizo hace unos dos años. Recientemente, se ha constituido además la Plataforma Ciudadana Pro-Jardín Histórico, con el objetivo de reivindicarlo y ha habido varias peticiones de reuniones con la Universidad, que no se han concretado. En octubre, el Consistorio prohibió la celebración de una fiesta de bienvenida, con paellas en el jardín, para evitar el deterioro del mismo.

El valor de este espacio, ubicado en un balcón privilegiado del Aljarafe, su historia y su proyección fue objeto de debate ayer en una mesa redonda en el Palacio de Exposiciones con motivo de la II Muestra de la Provincia. En su defensa, se posicionaron entre otros Víctor Pérez Escolano, catedrático y profesor de la Escuela de Arquitectura; Antonio Tejedor Cabrera, docente del mismo centro; y Juan Carlos Muñoz Zapatero, redactor del PGOU de Castilleja.

El jardín fue creado por encargo del tercer duque de Guzmán, Joaquín Rodríguez de Rivas, diplomático en París, y es la última obra de Forestier. En 1930, se vendió a los hermanos Lissén, que ceden toda la casa-palacio al Ayuntamiento de Sevilla. Ésta lo donó a su vez a la Universidad, como residencia para artistas hispanoamericanos. La orden religiosa lo asumió como Colegio Mayor femenino en 1964.





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