Ruido
de tráfico. Gente que pasa sin mirar. Delante, la puerta de un
antiguo teatro, reconvertido en cine de películas X, vuelto a reconvertir
en sede de la Iglesia de los Adventistas del Fin del Mundo Para Cuando
el Atleti Baje A Segunda (cofinanciados por Jesús Gil). Un cartelón
enorme, que reza: "Jesús te ama, capullo". Abajo, uno más
pequeño: "HOY: Reunión de los damnificados por la fabricación
criminal de muñecas Chochonas". El paseante entra con un paquete
bajo el brazo.
Dentro, una docena de personas hablan animadamente, pero un sujeto con
jersey de lana gorda y cuello alto y pantalón de pana sube al estrado:
- ¡Compañeros! ¡Compañeros! ¡Haced el
favor de sentaros, que vamos a dar comienzo al acto!
- ¡Acto es lo que hago yo con mi parienta, capullo estreñíooo!
El compañero sonríe, dando a entender su carácter
abierto, sabedor de que si uno quiere llegar a las masas (las masas de
una docena), debe contribuir tambien decisivamente a su educación
y al respeto de sus particularismos.
- Voy a presentarme, compañeros. Soy el doctor
Chiriflú, representante de la organización ecologista:
"BlueLove" y estamos aquí por un asunto trascendental. Este engendro
(pone una muñeca encima de la mesa) está fabricado por el
gigante multinacional "Tinky-Winky Corporation" y nuestra organización
(subraya la palabra organización) ha detectado casos, numerosos
casos de toxicidad infantil producidos por este aborto. El objetivo de
este meeting (subraya la palabra meeting) es integrar a los consumidores
damnificados en un movimiento de amplio vuelo que incluya (saca los dedos)
A) Coordinación de acciones de protesta, B) presión sobre
los organismos oficiales y C) boicot activo a la multinacional asesina
(le queda un cuarto dedo, pero lo esconde, ya que había calculado
mal) ¿Alguna pregunta?
- ¿Qué clase de toxicidad han encontrado?
- Alergias. Alteraciones de los mecanismos inmunes. Alteración
del ecosistema. Deforestación. Reducción del número
de especies (en este punto, el doctor, que está leyendo, sospecha
que alguien especialmente perezoso ha hecho un copy-paste de la hoja informativa
sobre los alimentos transgénicos, pero no es cosa de venir a sacar
pegas a estas alturas)…Cancerogénesis…
Un silencio horrorizado se extiende por la audiencia. Tras minutos de
genuino terror, el auditorio se siente impelido a participar.
-Quisiera hacer una consideración previa, si me lo permite – Un
joven con gafas de menos dieciocho dioptrías en ambos ojos se levanta
– soy miembro de las juventudes maoistas-engelianas-mostoleñas
y quisiera establecer una premisa conceptual de carácter previo.
- Establezca, compañero, establezca.
- El rasgo cualitativo burgués del sustantivo "chochonas" opino
que es inaceptable. En particular el uso de la letra che es un rasgo ligado
a generaciones antiguas, a políticas represoras y a estados políticos
centralistas. Si queremos gozar de la credibilidad de los sectores más
jóvenes y dinámicos de nuestro tiempo debemos establecer
un marco afín previo: propongo una iconografía adecuada,
que establezca además distancias con el capitalismo criminal de
la Tinki-Winki Corporation. No más chochonas reaccionarias, hablemos
más bien de "Txotxonas"
- Muy bien apuntado. Ahora, otro punto del acta. Quisiéramos saber
si entre sus hijos se han producido nuevos brotes tóxicos. ¿Alguien
tiene algo que decir?
- Si. Mi hijo tuvo paperas y el cabrón del médico ni siquiera
preguntó por posibles focos tóxicos contaminantes.
- ¿Ven? Ahí se nos abren nuevas vías de investigación…
- ¡Unas paperas como cojones de caballo percherón!
- Lo entiendo, lo entiendo… Claro que las paperas son una enfermedad vírica…
es claro y meridiano lo que ocurre: el fallo multisistema inmunológico
produce una mayor susceptivilidad a las infecciones, por banales que estas
sean… Los linfocitos CD4, sin duda…
- ¡Unas paperas como melones de Villaconejos!
- Pues eso no es nada (otro padre interviene)… ni hija nació con
luxación de cadera…diez meses de escayola…
Otro silencio ominoso.
- Toxicidad genética (subraya la
palabra genética). Lo preveíamos, claro… casi todo acaba
en lo mismo… El monstruo de nuestro tiempo ataca de nuevo...
(Otro padre pregunta asombrado como pudo la muñeca txotxona producir
semejante cosa si su hija aún no había nacido y tampoco
había podido jugar con ella, pero el padre primigenio le mira con
desprecio, ofendido por semejante falta de sensibilidad). Sesenta y dos
síntomas más tarde, nuestro personaje con el bulto debajo
del brazo toma por primera vez la palabra:
- Estooo…. Perdonen ustedes, pero verán…. Soy funcionario del Instituto
Toxicológico y es que me enterado de su reunión…. Doctor
Chiriflú, puedo hablar un momento…
Sorpresa. Desaprobación. Murmullo de protesta. El poder oficial
desgranando sus tentáculos…
- Es que, verán ustedes…. Las cosas no son exactamente como las
cuentan ustedes… no vale que uno de sus críos haya tenido una enfermedad
para afirmar que la causa de esa enfermedad ha sido este juguete. Lo que
habría que ver es si la población de niños con ese
juguete tienen más episodios patológicos comparándola
con la población normal ¿entienden? Un estudio serio, con
una muestra suficiente…
-¡Paperas como huevos de dinosaurio prehistórico!
- Pero, de cualquier forma, tengo noticias para ustedes… Resulta que en
mi departamento hemos estado detrás de la dichosa muñeca
y, en efecto, hay algo… la pintura utilizada para realzar el vello púbico
acorde a nuestros tiempos tiene plomo, un tóxico prohibido. El
expediente está en curso y suponemos que esta misma semana podremos
paralizar su fabricación.
- Excelente… (pero el doctor Chiriflú no subraya la palabra excelente
y de hecho parece estar algo desinflado)
- Pero hay otra cosa en la que se equivocan… la muñeca no la fabrica
la Tinkiwinki Corporation… La muñeca de TinkiWinki no ha sido aún
comercializada en nuestro país. Esas que tienen ustedes son una
copia infame, fabricadas en una nave sin licencia de Fuenlabrada…
El doctor Chiriflú se crece subitamente varios palmos y su voz
adquiere tonos bíblicos cuando dice:
- Ya veo… lo de siempre… el poder atacando sin ataduras, a calzón
quitado (subraya estentóreamente la palabra calzón) a los
indefensos artesanos, a los trabajadores manuales para dejar el camino
expedito (innecesario decir que subraya la palabra expedito) a las grandes
multinacionales… Historia Universal de la Infamia, escrita siempre con
los mismos renglones… Pues debe saber, funcionario
mercenario, que haremos todo lo posible para obstaculizar sus planes
aviesos…
- Pero, pero… le juro que tiene plomo… los niños pueden chuparla…
le enseño los análisis si quiere…
Follón. No hay tiempo para nada más. Los fieles de la Iglesia
Adventista se amontonaban en la puerta y cantan salmos. Alguna devota
inquieta atiza con su misal al joven de las dieciocho dioptrías,
que la mira con una mirada olímpica de contenido puramente maoista.
Llueve. La vida sigue y el Atleti pierde en casa con el Numancia.
|