"El
show de los teletubbies es obviamente una apologia de las drogas." Señor Carne se levanta cada mañana del mundo a las 7:55 AM y conduce su Fiat Regata hasta los estudios de television de Channel 9. Mete una tarjeta magnetica en una ranura y la barrera del parking se levanta. Sube la rampa y aparca en una plaza del segundo piso. Toma el ascensor y, medio atontado, se dirige a la cafeteria de los estudios. Nada mas verle llegar, Gallina Vieja le prepara un cafe solo y sin azúcar. Señor Carne deja una moneda gorda sobre la barra que Gallina Vieja se apresura a meter en la caja registradora. Con un imperceptible gesto de cabeza, Señor Carne saluda a Gallina vieja y se lleva el cafe para la mesa. Alli se lo chupa en el tiempo que tarda en consumirsele el pitillo. Luego, marcha en silencio pasillo adentro, hacia los vestuarios. Alli se desviste, se queda en gallumbos y, resoplando y contorsionandose, se embute en el traje de teletubi. Entonces camina hacia el plato de rodaje. En adelante y hasta las tres de la tarde, Señor Carne tiene un aspecto azul y extraterrestre. De su cabeza, brotan dos antenas como dos cuernos. En el plato y durante el rodaje, Señor Carne trabaja a las ordenes de Puerco Desconsiderado. El resto de la jornada viene a ser como una representacion de Aladino y la lampara maravillosa: Puerco Desconsiderado formula un deseo y Señor Carne lo hace realidad. Revuelcate por el suelo, pide Puerco Desconsiderado. Rie, pide Puerco Desconsiderado. Salta, pide Puerco Desconsiderado. El manda y ordena y asi se hace. Señor Carne hace cuanto se le pide y Puerco Desconsiderado y su equipo lo filman en video de calidad digital para mayor disfrute de grandes y chicos. Puerco Descondiderado es Aladino y Señor Carne el genio. Solo que los deseos son mas, muchisimos mas de tres. Señor Carne es un teletubi, pero no es el unico: Cuatro señores mas enfundados en disfraces de colorines danzan y dan palmas y se convulsionan al mandato de Puerco Desconsiderado. Huron Tullido, el señor que va dentro del traje rojo, tiene una hernia discal de campeonato, por lo que queda exento de las mamarrachadas mas audaces; danza y da palmas y se convulsiona, pero menos. A veces, en el plato y para el rodaje, hay niños con los que Señor Carne, Huron Tullido y los demas juegan si asi lo estipula el guion. El careto de teletubi del disfraz de Señor Carne rie todo el rato y hace mucha risa, pero por debajo la boca de Señor Carne esta toda torcida en una mueca. Señor carne detesta a la mayoria de crios con los que tiene que trabajar, especialmente a Pequeño Hijodeputa Consentido. Cuando a Señor Carne le toca escena con Pequeño Hijodeputa Consentido, Señor Carne se pone malisimo y tiene ganas de gritar. Señor Carne se pregunta a menudo que cara pondran el resto de sus colegas teletubis por debajo de sus mascaras de colorines. Una vez, se le ocurrio que si Pequeño Hijodeputa Consentido y todos aquellos niños mimados y abominables pudieran por un instante ver su boca torcida debajo de la careta, huirian despavoridos. Aquel pensamiento hizo sentir bien a Señor Carne. Por primera vez en meses, sonrio dentro de su mamotreto azul. En el plato, Señor Carne se pasa el dia diciendo cosas como "Oh una nube blanca", y luego repite "Si, es una nube blanca". Despues añade "Que bonita es la nube blanca" y prosigue "Es blanca, la nube", y asi sucesivamente. Asi, Señor Carne puede pasar entre dos y tres horas, en sucesivas tomas, dandole nuevas vueltas de tuerca e inesperados giros al concepto Nube Blanca. Conforme Señor Carne va largando sobre la nube o sobre la paparrucha de turno, Señor Carne siente como su cerebro va bajando el rendimiento, se va deteniendo hasta quedar casi a ralenti. A veces, en esta situacion, Señor Carne siente miedo y hasta panico. Finalizado el rodaje, Señor Carne se despide de Puerco Desconsiderado y del resto del equipo y marcha para el vestuario, donde se cambia y recupera su habitual apariencia rosada y carnosa. Luego se pasa otra vez por la cafeteria del estudio donde Gallina Vieja le pone un jotabe con hielo, y dos, y hasta tres. Señor Carne paga, Gallina Vieja dice gracias, y Señor Carne nunca contesta. Sobre las 3:30 PM, Señor Carne baja al parking, se pone al volante de su Fiat Regata e, introduciendo de nuevo la tarjeta de banda magnetica, sale por donde ha entrado. El guardia de seguridad de la cabina raramente levanta las narices de su ejemplar de Playboy. Señor Carne llega a casa sobre las 4:15 PM. Alli, en un plis plas, se prepara una tortilla francesa, una hamburguesa o se frie un par de cachos de lomo y despues se los zampa como con prisa. Luego se pone una cafetera a hervir que mantiene caliente durante toda la tarde y de la que llega a sacar hasta`para ocho carajillos. Se los chupa uno por uno mientras ve la tele sin mirarla. Los carajas acaban siempre por purgarle y, por lo general, Señor Carne se pasa las tardes cagando como un animal. Tres y hasta cuatro veces. Señor Carne lo acepta como un mal menor y, en realidad, no le molesta demasiado. A la taza del retrete se lleva siempre el periodico, que hojea sin leerlo. Sobre las 6:30, Señora Carne llega a casa del trabajo. De camino, ha pasado a recoger a Niño Carne, que siempre viene de su mano. Señora Carne tiene un pelin de panza porque esta preñada de un Bebe de Carne que Señor Carne le ha hecho, pero aun le queda lo suyo para parir. Niño Carne suele meterse en su cuarto a hacer los deberes o a jugar con los airgamboys. Señora Carne se sienta en el sofa junto a Señor Carne a mirar la tele. De tanto en tanto, Señor Carne suelta alguna chorrada esporadica para sentirse menos raro. Cuando siente necesidad de tirarse un cuesco, modula su ano hasta estar seguro de que no hara ruido, y si las cosas se ponen feas de verdad se agarra el periodico y se larga a cagar. A veces, mas avanzada la tarde, Costurera De Mierda, la vecina del cuarto, baja a hacer ganchillo y a hacerles compañia y a largar memeces sin ningun pudor. En esas ocasiones, Señora Carne saca siempre una lata de olivas que Costurera De Mierda se come siempre toda entera ella sola. Es por eso que Señor Carne la detesta. Por las memeces, tambien. Pero Costurera de Mierda es amiga intima de Señora Carne, asi que Señor Carne cierra el pico y calla como un puta. Otras, viene de visita Patan Priboso. Patan Priboso trae siempre una botella de alguna bebida blanca que se bebe a medias con Señor Carne. Señora Carne aborrece a Patan Priboso y nada mas verle llegar marcha del comedor con alguna excusa. Como Patan Priboso y Señor Carne beben mucho y deprisa, Señor Carne se ve obligado a hacer muchos viajes a la cocina a por hielo y es facil que se cruce con Señora Carne. Señora Carne no pierde entonces oportunidad para echarle una mirada de reproche a su marido. Pero Señor Carne se hace el longuis y vuelve al comedor con mas hielo y unos ganchitos. Se sienta y sigue largando que si tal, que si cual, que si el futbol, que si hostias. Señora Carne los oye desde el pasillo y se siente medio mal. Sin embargo, Señora Carne sabe bien que Patan Priboso jamas marcha antes de haberse pulido la botella entera, asi que se echa en su cuarto y hojea el periodico sin leerlo. Sobre las 10:00 PM y con visitas o sin ellas, Señor y Señora Carne quedan solos y Niño Carne deja lo que dios quiera que este haciendo, sale de su cuarto y, hambriento, exige su papeo sin miramientos. Señora Carne descongela algo en el microondas y los tres se sientan en la mesa del comedor y zampan en silencio frente al televisor. Señor Carne es siempre el ultimo en irse a dormir. A veces, antes de entrar en su cuarto y echarse en la cama junto a Señora Carne, se da un garbeo por el piso vacio. O entra en el cuarto de Niño Carne para mirar como duerme. Una vez, cuando Niño Carne era aun un bebe, de repente tuvo la certeza de que Niño Carne estaba muerto. Tan seguro estaba que le tomo el pulso y cuando sintio las pulsaciones hasta se extraño. Aun hoy, a veces, Señor Carne mira a Niño Carne dormir y le cuesta mucho comprender que haya sido el quien ha engendrado toda esa carne con su polla. Pero tarde o temprano, tambien Señor carne acaba metiendose a dormir. Esta noche, en la cama y en estado de entrevela, se medio acuerda de que la noche en que conocio a Señora Carne. Recuerda que hablaron y rieron. Se fumaron un porro en un R-5 rojo y despues echaron un polvo en un descampado. Entonces se duerme. Señor Carne tiene 39 años y lleva repitiendo con minimas variaciones este mismo ritual desde hace dos, cuando entro a trabajar de teletubi. El empleo de teletubi atormenta a Señor Carne. En casa de Señor Carne, el programa de los teletubis esta estrictamente vetado y niño carne lleva un resentimiento encima de no te menees porque no le dejan verlo. Niño Carne tiene solo 9 años pero como es un chaval espabilado y anticipadamente se huele el pitorreo, cuando en el cole le preguntan de que curra su viejo miente como un mal bicho y se sonroja un poquitin. Han pasado dos meses y estamos a principios de Febrero. Son las 8:52 AM y Señor Carne esta sentado en la banqueta del vestuario de los estudios de television de channel 9. En la mano tiene un diminuto pedacito de carton coloreado que mira con fijeza largo rato hasta que, por fin, se lo echa a la boca. Aunque carece totalmente de sabor, comienza a chuparlo con fruicion. El cartoncito coloreado se lo dio ayer a Señor Carne Gusano Cretino. Gusano Cretino es el teletubi verde. A lo largo de toda su carrera de teletubi, Señor Carne ha evitado siempre todo contacto personal con el equipo de produccion de los teletubis, y al resto de señores que visten de teletubis, mas aun. Señor Carne, a veces, sueña con un teletubi demoniaco que se masajea la verga mientras le guiña un ojo. Se trata de un pollon verdaderamente descomunal del que, acabada la faena, brotan flores. El caso es que Gusano Cretino se puso ayer demencialmente pesado. Tanto insistio en acompañar a Señor Carne a la cafeteria que Señor Carne termino por claudicar. Para sorpresa de Señor Carne, Gusano Cretino resulto ser un tipo majo y acabaron por emborracharse juntos. Ya completamente mamado, Gusano Cretino le hizo confidencia a Señor Carne de que, en horas de trabajo, se veia obligado a ir "completamente pasado de acido" porque de lo contrario "hubiera tenido que ahorcarse hacia ya años". Gusano Cretino le canto a Señor Carne las excelencias del acido. Gusano Cretino levanto la mano y pidio dos jotabes con hielo mas. Gusano Cretino dijo muchas cosas mas, pero hoy Señor Carne no se acuerda. Completamente tajados, se pelearon por pagar y Gallina vieja les lanzo una mirada de reproche pero Señor Carne se hizo el longuis. En el parking, Gusano Cretino le regalo a Señor Carne una tira de acido y los dos se separaron cada cual por su lado pegando tumbos. Señor Carne se levanta de la banqueta y se mete en el disfraz azul. Una vez mas y como todos los dias, se patea el pasillo hasta el plato. Solo que hoy debajo de su careto azul y eternamente sonriente de teletubi, Señor Carne chupa del tripi como una bestia. Durante la primera hora salta y da palmas y hace el el burro sin conviccion y muriendose de asco a cada instante. Entonces ocurre: De repente y mientras esta hablando con unas flores de pega, se siente extraño. No extraño mal, sino extraño bien. De repente le hacen risa las flores de pega y dice "Como estais flores?". Y dice "Que bonitas sois, flores". Y dice "Sois flores muy bonitas". Y asi sucesivamente, va largando toda la morralla del guion. Solo que hoy, segun la recita, se la cree a pies juntillas. Durante el resto del rodaje, Señor Carne lo pasa en grande porque, de pronto, se siente plenamente teletubi, si tal cosa es posible. En adelante, Señor Carne se chupa un acido cada vez que tiene que salir a hacer el gilipollas y se lo pasa cañon. Señor carne se ve durante las mañanas completamente inmerso en el mundo de los teletubis, un mundo que de pronto se le aparece como maravilloso y mucho mas interesante que las aburridas tardes que aun se mama junto a Señora Carne, Costurera De Mierda y Patan Priboso. A menudo, a las tres y cuando termina la sesion de rodaje, Señor Carne y Gusano Cretino se van para la cafeteria donde se meten muchos jotabes con hielo para bajar los efectos del acido. De vez en cuando, Señor Carne le da un fajo de molla a Gusano Cretino y Gusano Cretino le pasa a Señor Carne una tira de acido por debajo de la barra. Pronto, Señor Carne se ve incapaz de soportar ya por mas tiempo las espantosas tardes que se ve obligado a pasar junto a Señora Carne, Costurera De Mierda y Patan Priboso. Todos le deprimen. Se aburre de tan mala manera que se medio abandona. Ya no pone cuidado alguno en que sus cuescos postcarajillo no retumben. Sin ningun tipo de reparo y sentado en el sofa, se lanza unos pedos devastadores que siempre se ven premiados con la mirada reprobadora de Señora Carne. Pero miradas aparte, Señora Carne calla como una muerta y Señor Carne se hace el longuis. Lo que quiere Señor Carne es que llegue la mañana siguiente para sumergirse de nuevo en el fabuloso mundo de los teletubis. Despues de darle muchas vueltas al coco, un buen dia Señor Carne decide meterse un par de acidos en vez de uno. La experiencia, por fuerza, sera mas intensa y, con suerte, los efectos se alargaran hasta bien entradala tarde, piensa. Dicho y hecho: esa mañana Señor Carne se mete la mandanga en la boca y se echa a caminar por el pasillo en su traje de faena. Tras unos cuarenta minutos, ocurre. De repente se siente extraño. No extraño bien, sino extraño mal. Cuando Señor Carne recupera la conciencia, lo primero que hace es mirar a su alrededor alarmado. Resopla aliviado al comprobar que se encuentra en el sofa de su casa, sin embargo, pronto se da cuenta de que va todavia embutido en su disfraz de teletubi. El reloj del video marca las 3:03 PM e, incapaz de recordar nada, se ve de nuevo atenazado por el desasosiego. Señor Carne pega un salto de casi un metro al ver su foto proyectada en el televisor encendido. Luego aparece una foto de Pequeño Hijodeputa Consentido. Luego un presentador y luego de nuevo su foto. De repente Señor Carne toma vaga conciencia de haber apretado algo quebradizo entre las manos en algun momento de la mañana. "Oh, mierda", dice Señor Carne. La foto de Pequeño Hijodeputa Consentido aparece de nuevo en pantalla y Señor Carne repite "Oh, mierda". Y otra vez: "Oh, mierda". Y asi sucesivamente, como si de un guion de los teletubis se tratara.
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